Confiar tu proceso de compra o de venta implica darle confianza al intermediario, ya que esa persona verá información personal, financiera y familiar tuya.
Asegúrate que estas poniendo tu confianza en un profesional acreditado y no en algún cometa de paso o en alguien “todero” que atiende varios negocios a la vez.
A partir de allí podrás seguir un camino más tranquilo y seguro.